La alta capacidad aislante y la versatilidad del Poliuretano lo convierten en un material altamente eficiente para todo tipo de aplicaciones
El poder aislante del Poliuretano, unido a su vesatilidad, hacen de él un material altamente eficiente ya no sólo en el aislamiento de viviendas, sino de otro tipo de elementos que nos rodean en nuestro día a día.
Es ligero, fácil de manipular y de instalar, y su baja conductividad térmica permite alcanzar el mismo nivel de eficiencia energética de otros materiales aislantes con un espesor mucho menor.
Desde tuberías a fachadas, suelos y cubiertas, el Poliuretano aporta unas excelentes prestaciones térmicas y de durabilidad. Algunas de las aplicaciones más habituales del poliuretano como aislante son
Almacenes mayoristas
Los productos tienen que ser almacenados en ciertas temperaturas en todo momento, por lo que, la mayoría de los almacenamientos mayoristas se encuentran aislados con poliuretano.
Calderas de biomasa
Las calderas de biomasa que utilizan diversos residuos como combustible limpio, se están volviendo más comunes en las zonas rurales. El aislamiento de poliuretano permite el ahorro de energía adicional cuando la caldera está en funcionamiento.
Graneros y granjas
El aislamiento de poliuretano mantiene a los animales de granja caliente en invierno y fresco en verano. Ventanas, puertas y conductos de agua también están aislados para la comodidad de los animales.
Silos
El aislamiento es crucial para los silos, ya que proporcionan la temperatura necesaria en el interior. Las paredes y el techo son a menudo aislados con espuma de poliuretano de gran grosor, lo que hace que los productos en el interior intacto y fresco.
Ventanas y persianas
Las propiedades de aislamiento son idóneas para el aislamiento de ventanas, donde su uso es muy habitual, con el objetivo de reducir la necesidad de calefacción de alta y costes de refrigeración.
Tuberías
El aislamiento asegura que el agua que pasa a través de las tuberías se mantenga caliente o fría y ayuda a ahorrar energía.